Aseguró
el director presidente de la institución
Para el director presidente de la Policía de
Miranda, comisario general Elisio Guzmán, la transparencia en la labor que
ejecutan los funcionarios de los distintos organismos de seguridad comienza en
el proceso de selección de los
aspirantes y luego en la aplicación de controles de supervisión adecuados para
identificar conductas impropias o incluso las cualidades del recurso humano.
“La constante revisión de las
actuaciones policiales permite a cada organismo prevenir que sus funcionarios
no incurran en delitos, excesos y malas prácticas policiales. Del mismo modo,
existen métodos para realizar correctivos, sanciones o destituciones del
efectivo que vulnera la justicia que juró garantizar. La mala actuación de un
efectivo afecta la imagen de todas las instituciones de seguridad, porque las
personas se acuerdan del uniforme del policía y no del nombre del funcionario,
por ello debe haber rigurosidad en cada caso que se detecte”, dijo.
Por su parte, el comisionado
Jesús Sancler, director de la Oficina de Respuestas a las Desviaciones
Policiales del cuerpo de seguridad estadal, informó que gracias a ese monitoreo
constante de cada efectivo, han destituido a 15 funcionarios en lo que va de
año. Detalló que el 90% de la cifra corresponde a uniformados que abandonaron
el cargo y que sólo poseen dos casos de exceso policial, además de la
aprehensión de un efectivo que trasgredió la ley.
“Los jefes y supervisores
tienen un rol fundamental para que los oficiales no incurran en malas
prácticas. Son ellos quienes en principio ejercen los controles necesarios para
evaluar a cada funcionario y eso se logra revisando de manera minuciosa cada
novedad y hacerle seguimiento a los casos hasta que se entreguen a la Fiscalía
correspondiente. Por otra parte, también existe una formación constante del
personal para maximizar los valores éticos, familiares y profesionales”,
indicó.
El comisionado resaltó que son
esas evaluaciones y controles los que permitirán a cualquier cuerpo de
seguridad mantener la rectitud profesional. Además comentó que cuentan con el
Sistema de Calificación Policial (Sicapol), con el cual pueden evaluar el
desempeño positivo y negativo de cada oficial, su rendimiento y productividad,
a fin de otorgar reconocimientos en el caso de buenas conductas u orientación
legal, psicológica y profesional cuando detectan que la labor no se está
realizando correctamente.
“Debemos trabajar con cada
oficial desde que es un aspirante, ya que el proceso de selección es muy importante.
Durante esa fase determinamos el espíritu y compromiso con la justicia de cada
policía y desde ese momento lo instamos constantemente al respeto de las leyes,
a que no caiga en la tentación del delito, a defender los derechos humanos y en
especial en hacerle saber que la institución no será su cómplice si decide
tomar el camino del mal, sino que por lo contrario, cumpliremos con lo que
estipule la ley para determinar su responsabilidad en cualquier crimen”,
concluyó.
Iapem Prensa
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